Fernando Schwarz
Un nuevo estudio muestra que los pueblos del Paleolítico Medio decoraron intencionalmente herramientas de piedras, ofreciendo evidencia de que el pensamiento abstracto comenzó por lo menos 50.000 años antes de como se creía anteriormente.
Hace unos cien mil años, un grupo de humanos se reunió en la terraza frente a una cueva en la Baja Galilea para enterrar a uno de los suyos. Los dolientes honraron al difunto con varias ofrendas, incluyendo conchas marinas, piezas de ocre y un artefacto lítico.
Según la nueva investigación realizada por académicos israelíes y europeos, las herramientas encontradas en los años 70 en el sitio conocido como la Cueva de Qafzeh y reestudiada en los últimos años, ha sido fundamental para demostrar que nuestros antepasados eran capaces de pensamiento abstracto y expresión artística mucho antes de lo generalmente se pensaba.
«La mayoría de los investigadores adoptan un punto de vista europeo, sugiriendo que los humanos modernos conquistaron el mundo hace 50.000 años porque eran capaces de pensamiento abstracto, estaban mejor organizados, sabían cómo trabajar en grupos y, por lo tanto, lograron superar a los neandertales y otros tipos de homínidos», dijo la Dra. Goder-Goldberg. «Nuestra investigación se centró en demostrar que el pensamiento abstracto y el uso del simbolismo existían mucho, como sugirieron otros académicos».
En Manot encontraron un núcleo lítico que servía de herramienta, pero su estudio, como el de unas cuchillas, demostró que presentan líneas radiantes que parten del punto más alto de la herramienta y conforman líneas paralelas; en la plaqueta de Quneitra aparecen círculos concéntricos, lo que demuestra que hubo una intencionalidad en elaborar esos patrones.
Goder-Golberg, de la Universidad de Jerusalén, concluye: «Alguien grabó cada uno de los artefactos usando una piedra dura para formar estas decoraciones, siguiendo la topografía de la herramienta. Si bien los núcleos eran herramientas y, por lo tanto, tenían un propósito práctico, este pedernal se tomó para decorarlo. Es una obra de arte».

Derecha: la hoja encontrada en la cueva de Amud, cuyas marcas fueron creadas por abrasión casual.

